Mostrando entradas con la etiqueta China-P. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta China-P. Mostrar todas las entradas

11 febrero 2021

¿Qué ver en El Templo del Cielo: Altar Imperial de Sacrificio en Beijing (Pekín)?


En el sur de Beijing, en el enclave llamado "Ciudad China", se levanta el Templo del Cielo o Tien Tan, "paradigma del equilibrio y simbolismo de la arquitectura china".  Es el lugar en el que el Emperador cumplía con los ritos de la unión de la Tierra con el Cielo, cumpliendo, de esta manera, con su misión como Hijo del Cielo en la Tierra.  El Templo del Cielo  está declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1998.


Este impresionante lugar de sacrificios y oración es el lugar de culto más importante de la antigua China y está repleto de símbolos como pocas otras obras arquitectónicas de la Tierra.  Fue construido en el siglo XV en un parque de 300 hectáreas, que triplica el tamaño de la Ciudad Prohibida, y está considerado como el mayor templo de homenaje al Cielo en el mundo.  


Fue realizado por encargo del Emperador Yongle, de la dinastía Ming, durante los años cuarto a décimo octavo de su reinado (1406 a 1420). El Templo seduce por su incomparable armonía y se erigió en el lugar inmemorial de encuentro del Cielo con la Tierra, al que el pueblo jamás había tenido acceso durante las dinastías Ming y Qing. 

Cada año, después del solsticio  de invierno, tras haber ayunado y orado en el Palacio de la Abstinencia, el soberano en tanto que Hijo del Cielo iba a la principal pagoda del Templo del Cielo, de nombre Qi Nian Dian, edificada en madera sobre tres terrazas de mármol blanco, a rendir homenaje al Cielo y a darle parte de los acontecimientos importantes ocurridos en la Tierra a lo largo del año transcurrido.  En la noche más larga del año, el emperador ofrecía aquí seda y sacrificios de animales. También intercedía por su pueblo ante lo dioses y rogaba por una buena cosecha. Era el llamado Rito de las Cuatro Periferias.




En el equinoccio de primavera se celebraba, a su vez, el Rito de la Buena Cosecha y se efectuaban sacrificios para pedir al Cielo una abundante cosecha de grano.

Por ese motivo, la pagoda de Qi Nian Dian es conocida con el sobrenombre de Sala de Oración para las Rogativas por las Buenas Cosechas.  El templo es una joya, una gema cuyo color dominante es el azul (color que evoca el cielo), especialmente emotiva bajo la luz de Beijing en un día despejado y soleado.  Nuestra guía, muy erudita en todo lo relacionado con este lugar, no explicó la enorme cantidad de símbolos contenidos en cada nota de color, en la menor curva, en el más mínimo detalle de arquitectura y decoración... 


El edificio es de planta circular ya que las tradiciones chinas apuntaban que el Cielo era circular, y está construido totalmente en madera y no se utilizó ni un solo clavo.  La bóveda y las cubiertas superpuestas se apoyan sobre cuatro columnas de esfuerzo, conocidas como los Pilares del Dragón y representan las cuatro estaciones del año.



Situada en el mismo recinto del Templo del Cielo, en línea con el templo principal, la pagoda de Huang Qing Yu o de la "Bóveda Celeste Imperial" alberga bajo su cono de de tejas azules, las tabletas sagradas que servían para el culto.  La Bóveda está rodeada por el Muro Eco realizado con losas de "triple eco", que permiten escuchar cualquier sonido a la redonda, por pequeño que éste sea.








El altar Del Cielo era el lugar en que el Emperador ofrecía sus sacrificios al Gobernante del Universo y a los espíritus del sol, la luna y las estrellas, las nubes, la lluvia, el viento, los truenos y los ancestros del emperador.  El altar se encuentra en una Terraza Circular en forma de montículo sobre tres gradas de mármol blanco en las que apoya un círculo de 90 metros de diámetro y 6 de alto.  Las balaustradas están decoradas por dragones y otros símbolos de la naturaleza imperial. En el centro del círculo se encuentra la piedra circular llamada Tianxi, un lugar concurrido por los amantes de las fotografías de recuerdo.




En el parque, por la mañana, hay grupos de ciudadanos chinos practicando tai ji quan, otros participando en clases de baile y otros cantando. En en corredor de entrada al templo suele haber decenas de personas jugando a las damas, a las cartas y a juegos de apuestas. 



También es frecuente encontrarse con alguna pareja de recién casados en pleno reportaje fotográfico para inmortalizar su compromiso en con este fantástico escenario como fondo. El rojo es el color preferido de los novios por ser el color de la buena suerte y la prosperidad.


Otra curiosidad remarcaba es el Árbol de los Nueve Dragones.  Se trata de  un viejo enebro chino de más de 500 años de antigüedad.  Su nombre viene de las formas que aparecen en su tronco.  Los ciudadanos chinos se agolpan alrededor del mismo con los brazos extendidos. Esto lo realizan debido a una vieja creencia por la que piensan que el viejo enebro rezuma energía positiva.











22 mayo 2016

¿Qué hay que ver en Suzhou, la Venezia del Este en China?

Suzhou es una pequeña ciudad tranquila y apacible situada en el centro del delta que se forma en la desembocadura del río Yangtsé. Se encuentra a tan sólo 100 km de Shanghai.  Un lugar excelente para invertir una jornada de turismo. 


 La mejor forma de viajar desde Shanghai hasta Suzhou es en el tren veloz. Los billetes se encargan con antelación por internet.  Si eres extranjero, debes prever un tiempo extra en la estación para recoger los billetes en ventanilla, ya que se necesita presentar el pasaporte.

El problema puede acontecer si no te da tiempo a recoger tu billete porque haya una excesiva cola.  En ese caso, hay que cambiar la reserva de internet y que te den uno nuevo.  Todo un complejo proceso en el que tendrás que pasar por sucesivas colas y para el cual te tienes que apoyar en algún colaborador que hable chino e inglés.  El trayecto dura entre 40 minutos y una hora y media, dependiendo del tipo de tren y del número de paradas. la estación de origen.  No te olvides de que te den, también, el billete de vuelta.

Suzhou es una ciudad que destaca por sus canales, sus puentes de piedra, su barrio antiguo, sus pagodas y sus espléndidos jardines. Además, me gustaría resaltar la calidad humana y la buena predisposición de sus habitantes.


Suzhou es una ciudad muy acogedora y llena de encanto, con un barrio antiguo muy bien conservado.  Con casas de fachadas pintadas en blanco y tejados negros de cerámica, combina estrechas callejuelas con largos canales.  Los chinos dicen de ella que es un "Paraiso de la Tierra"

El urbanismo de su parte antigua sigue una disposición de doble tabla de ajedrez y sigue la idea antigua de combinar las vías fluviales y las calles que siguen el curso de los ríos y canales.  Todo ello aderezado con 280 jardines que se reparten a lo largo y ancho de la ciudad.  Nueve de estos jardines están incluidos por la UNESCO en su Lista del Patrimonio Mundial de la Humanidad.

La ciudad antigua está presidida por la Pagoda Beisi Ta que tiene una torre octogonal de 76 metros a la que se puede subir para contemplar extensas vistas de la ciudad. Las ventanas al balcón exterior tienen sugestivas terminaciones lobuladas.
Con el pago de la entrada se tiene derecho a un guía que nos acompañará en el recorrido a través de los diferentes edificios y jardines.  Por el jardín es frecuente ver pasear a los lamas del templo.
El lugar más reconocido en Suzhou es el Jardín del Administrador Humilde, Zhuozheng Yuan, mandado construir en le s.XVI por un funcionario jubilado llamado Wang Xianchen.  


Está dividido en secciones y dominado por una imponente vegetación, el agua de sus lagos, las colinas de piedras, los edificios y otros elementos decorativos.  Su superficie es de 12 Ha. Los pabellones más destacables son: EL pabellón de la Fragancia Lejana, el pabellón del Pato mandarín, el Pabellón Maranja y el pabellón retirado de Firmiana Simplex y Bambú.
  
Un paseo en góndola puede ser una buena forma de contemplar esta "Venezia China".  Los paseos en barca por los pequeños canales, salen de unas escaleras que están enfrente del Jardín del Administrador Humilde. 


    Una del las calles más famosas y concurridas es Ping Jiang, con sus numerosas tiendas tradicionales entre las que destacan las de prendas de seda.  A la hora de la comida, muchos puestos callejeros ofrecen sus comidas, preparadas con esmero y pulcritud.
    Pero, sin duda, mi calle favorita es la Shan Tang Jie, plagada de antiguos edificios renovados.  Esta calle tiene más de 1.500 años de antigüedad y transcurre junto a uno de los canales.  Al atardecer, los canales y los edificios se iluminan, proporcionando un agradable ambiente a este hermoso paseo repleto de pequeñas tiendas, cafés y restaurantes. 



Por último, quiero hacer referencia ados personas, Tan y Lí, que nos acompañaron y nos explicaron los aspectos más relevantes de esta preciosa ciudad, así como otros muchos aspectos de la sociedad y de la cultura de este gigantesco país que es China.





12 abril 2013

La Gran Muralla China


Tras hacer una recopilación de las fotografías de mi viaje de vacaciones a China, he decidido innovar el planteamiento de este blog de la siguiente manera: elijamos una foto con gente (en realidad, en las ciudades chinas es materialmente imposible hacer ninguna foto que no tenga gente), contemos brevemente la historia de la situación que refleja la foto y, por último, situemos la historia en su contexto ambiental y el lugar en el que se encuentra. Este proceso, así definido, me va a permitir realizar nuevas aportaciones similares, nuevas historias, en un futuro próximo en la misma entrada del blog.

Con esta innovación, soportada también a través de Twitter y de Facebook, pretendo una mayor interacción con mis lectores y seguidores, a través de los comentarios y preguntas que queráis formular.

Para ilustrar esta nueva vivencia he elegido una foto de una señora subiendo unas escaleras. Su rostro es el mejor reflejo del esfuerzo que está realizando en ese momento para conseguir un objetivo que intuimos será muy importante para ella. A estas alturas, ya hemos superado más de doscientos escalones de subida y, en ese tramo, los peldaños se tornan más altos. La señora, afronta este final de tramo agarrándose fuertemente a la barandilla para tirar de su pequeño cuerpo con los brazos e impulsarlo hasta la siguiente meseta de escalera.



Le tiendo la mano, se agarra muy fuertemente, y, con un espíritu totalmente renovado por la ilusión de ser ayudada por un extranjero, recobra súbitamente toda su fuerza y culmina el tramo de escalera con una enorme sonrisa de agradecimiento y satisfacción. ¡Prueba superada!



Hemos empezado la ascensión de una de las zonas restauradas de la Gran Muralla China.  Es un día algo gris en el que la primavera aún no ha mostrado su acción renovadora sobre la naturaleza vegetal.  Lo mejor de la Gran Muralla son los miles de chinos que, procedentes de todas la provincias del país, inundan cada día sus escalinatas.  Orgullosos de la grandeza de su pasado ante la magnitud de la Muralla, dan cumplimiento a uno de los sueños que dan sentido a una vida de esfuerzo y abnegación.  Con satisfacción, compensan aquí los miles de días dedicados al trabajo, es uno de los grandes momentos de sus vidas y eso se nota.

Poner el pié en la Gran Muralla es el gran acontecimiento para todas estas personas con las que estamos compartiendo esta vivencia.  El orgullo y la importancia de este momento vital quedan reflejados en sus caras de satisfacción y en sus ansias por inmortalizar este día a través de los retratos familiares y las fotografías de la Muralla.  Fotografías que enviarán a todos sus conocidos y decorarán, a partir de ahora, el punto central de la estancia principal de sus casas.



En mitad de este gran espectáculo protagonizado por estas gentes... ¿cómo es posible que alguien esté haciendo una mudanza en plena Gran Muralla?.  Pues, sí, queridos lectores, nos cruzamos con una mudanza por muy increíble que les parezca




Esta muralla colosal ha alimentado desde siempre la imaginación y ha hecho soñar al mundo entero.

Se trata de la única infraestructura terrestre que puede observarse por el ojo humano perfectamente desde la Luna.

Su origen se remonta a una decisión del "Primer Emperador" Ts´in Che Houang-ti (221-209 a.d.C) por la que se integrarían todos los sistemas de defensa que protegían la frontera norte de China contra los ataques de los invasores Hiong-nou, a los que nosotros llamamos los "hunos". 

La muralla es algo prodigioso y corre a lo largo de las crestas, se ciñe a las pendientes del terreno, atraviesa los valles, serpentea en torno a los macizos sin ninguna interrupción, sin una sola abertura fuera de las pocas puertas que, antaño, estaban celosamente guardadas.

Fue abandonada cuando dejó de ser una frontera entre la
barbarie y China, aunque, más tarde, durante los periodos revueltos de la dinastía Ming, cuando los Mongoles se volvieron muy activos,... los muros que se habían hundido fueron reconstruidos y la muralla fue reforzda.


agradezco tus comentarios o preguntas

Nombre

Correo electrónico *

Mensaje *

Mapa de los países que he visitado


visited 80 states (35.5%)
Buy Douwe's Machine Learning Book